Crecimiento por la Palabra

En estos últimos 4 días de devocionales, hemos visto el proceso del crecimiento espiritual basado en la Palabra. Podríamos resumirlo así: ACTITUD + EXPOSICIÓN + PROCESAMIENTO + APLICACIÓN = CRECIMIENTO.

Ésta es, sin lugar a duda, mi etapa favorita del proceso. Mi lado favorito de la ecuación: el crecimiento. Podríamos también llamar a esta etapa: éxito, realización, cumplimiento. Dios nos pinta también un cuadro maravilloso donde describe el resultado de todos estos pasos. 

El Salmo 1 narra que la persona que pone en práctica este proceso, aquella que se deleita y medita en la ley perfecta de Dios día y noche, se convierte en una persona feliz, en una persona dichosa, bienaventurada. ¿Es eso lo que estás buscando en tu vida?  

Describe a esa persona como un árbol plantado junto a un río: que no se seca, cuya hoja no se marchita y que da su fruto a su debido tiempo. ¡Eso es precisamente lo que yo quiero para mi vida y lo que Dios tiene planeado para la tuya! Quiere que todo lo que emprendas esté lleno de gozo y de propósito. 

Este pasaje NO quiere decir que los seguidores de Jesús no experimentaremos pruebas o dificultades, pero Sí significa que cuando esas pruebas y circunstancias difíciles aparezcan, la palabra nos sostendrá. Cuando ese diagnóstico inesperado venga, veremos las cosas como Dios las ve. Cuando las cosas se compliquen, nuestro árbol no se marchitará. Se mantendrá allí firme a pesar de las pruebas.   

Mi deseo es que tú te conviertas en ese árbol plantado junto a las aguas, que se nutre de la palabra, que se mantiene en pie en las temporadas difíciles, que prospera en todo lo que hace.

Si este d ha sido de devocional ha sido de ánimo para ti, compártelo con otros  que lo necesiten. ¡Convirtámonos en hombres y mujeres centrados en la palabra!